El joven cerró los ojos y recordó los sueños de su infancia. Ahora, los fríos olores del bosque que captaba eran reales, y la vida de guerrero se extendía ante él. Sintió un inmenso júbilo que le subió por las patas y le inundó todo el cuerpo. [···] Ahora ya era un guerrero. [···] Corazón de Fuego ya no era el joven inocente que se había unido al clan hacía varias lunas. Era más grande, más fuerte, más rápido y más sabio.
El siguiente artículo contiene información detallada del capítulo 25 de En territorio salvaje. Si estás buscando un resumen más corto del libro, por favor mira la cronología.
Alerta de Spoiler: A partir de ahora se podrían revelar detalles de la trama y argumento.
Zarpa Gris y Zarpa de Fuego, junto con la patrulla del Clan del Trueno (conformada por Tormenta Blanca, Sauce, Musaraña, Cebrado y Viento Veloz, junto a Fauces Amarillas), regresan al campamento. Escarcha está en el medio del claro, echada con la cabeza sobre las patas, pero se incorpora con la llegada de la patrulla, ya que huele a sus pequeños. Los cuatro cachorros de Escarcha salen a su encuentro y su madre los recibe a lametazos. Fauces Amarillas observa la escena con cautela, desde lejos. Estrella Azul se acerca al ver a los cachorros, y le pregunta a Tormenta Blanca si todos están bien. Los felicita respetuosamente, y Tormenta Blanca agrega que no hubieran podido lograr la misión si no fuera por Zarpa de Fuego. Sin embargo, Garra de Tigre interrumpe la situación inquiriendo furioso por qué la traidora de Fauces Amarillas volvió al campamento. Zarpa de Fuego responde que Fauces Amarillas no es una traidora. Los gatos, al oír esto, se congregan alrededor del grupo. Con odio, Rabo Largo espeta que Fauces Amarillas mató a Jaspeada. Zarpa Gris sugiere que la inocencia de Fauces Amarillas podría probarse si alguien revisa entre las uñas de la difunta Jaspeada, apuntando que encontrarán entre ellas pelos marrones pertenecientes a Cara Cortada, y no pelos grises de Fauces Amarillas. Musaraña, bajo la orden de Estrella Azul, revisa el cuerpo de Jaspeada y encuentra pelos marrones entre sus uñas. Anuncia esto al clan, aunque Garra de Tigre todavía continúa enojado, y agrega que el hecho de que Fauces Amarillas no haya matado a Jaspeada no significa que no haya podido ser ella quien robó los cachorros de Escarcha. Zarpa de Fuego, enojado, defiende a la gata explicando al clan que sin Fauces Amarillas, jamás habrían recuperado a los cachorros, ya que ella había advertido quién había sido el verdadero culpable y había salido a buscar a los pequeños por su cuenta. También había arriesgado su vida al regresar al campamento del Clan de la Sombra, y también había ideado el plan que les permitió introducirse allí, dándoles la oportunidad de vencer a Estrella Rota. Tormenta Blanca confirma esto, y Estrella Azul se alegra de contar con Fauces Amarillas como una amiga.
Escarcha pregunta si Estrella Rota está muerto, pero Tormenta Blanca le responde que escapó, aunque nunca volvería a dirigir al Clan de la Sombra. También le informa a Estrella Azul que prometió dejar al Clan de la Sombra en paz hasta la próxima luna llena, para que tengan tiempo de recuperarse. Estrella Azul aprueba sabiamente su decisión, y luego se acerca a Fauces Amarillas para pedirle que sustituya a Jaspeada como la curandera del Clan del Trueno. Esta propuesta provoca nerviosismo en el clan. Escarcha cruza miradas con las otras reinas, quienes terminan aprobando la proposición. Fauces Amarillas hace una pequeña reverencia aprobatoria a Escarcha, y luego acepta la propuesta de Estrella Azul, uniéndose formalmente al Clan del Trueno. Zarpa de Fuego se siente feliz porque ahora Fauces Amarillas pertenece a su Clan, pero luego recuerda con tristeza que nunca más volverá a ver a Jaspeada.
De repente, Estrella Azul pregunta dónde se encuentra Cuervo, y Garra de Tigre cuestiona lo mismo, agregando con toda intención que le parecía raro que hubiera desaparecido al mismo tiempo que Estrella Rota. Audazmente, Zarpa de Fuego responde que Cuervo nunca fue un traidor, y que está muerto. Anuncia que encontraron su cuerpo en el territorio del Clan de la Sombra, y que por los olores, parecía haber sido atacado por una patrulla. Promete contarle a Estrella Azul todo más tarde. Fauces Amarillas le dirige una mirada interrogativa al aprendiz, pero no lo delata.
Garra de Tigre enseguida aclara con falsedad que nunca había insinuado que Cuervo era un traidor, y que él como cualquiera lamenta su terrible pérdida. Zarpa de Fuego sabe que estas son palabras huecas, imaginando qué diría Garra de Tigre si supiera que Cuervo estaba probablemente cazando ratas con Centeno en ese momento. Estrella Azul también declara su pena, pero dice que el clan llorará después a Cuervo, ya que hay que llevar a cabo otro ritual. Le dice a Zarpa de Fuego y a Zarpa Gris que pelearon valientemente, y Tormenta Blanca afirma que lucharon como auténticos guerreros. Estrella Azul mira hacia el Manto Plateado y pronuncia unas palabras rituales para solicitar a sus antepasados guerreros que observen a ambos aprendices, quienes están siendo encomendados al Clan Estelar como guerreros. Como parte de la ceremonia, Estrella Azul pregunta a Zarpa de Fuego y Zarpa Gris si prometen respetar el Código Guerrero y proteger y defender al Clan del Trueno incluso a costa de su vida. Ambos lo prometen, y Estrella Azul les da sus nombres de guerreros: Corazón de Fuego y Látigo Gris. Estrella Azul le dice a Corazón de Fuego al oído que está orgullosa de tenerlo entre sus guerreros. Ambos guerreros son elogiados por todo el clan, que corea sus nuevos nombres.
Estrella Azul declara que la luna está casi en lo alto, y que es la tradición que los nuevos guerreros velen en silencio el campamento esa noche. Al pasar por al lado de Garra de Tigre, éste amenaza a Corazón de Fuego. El gato cree urgente y necesario advertir a su líder sobre la traición del lugarteniente, pero Estrella Azul no le permite hablar, recomendándole que le cuente lo que desee al día siguiente por la mañana. Corazón de Fuego observa todo el bosque que lo rodea, ahora como un guerrero. De repente, su mirada se cruza con la fría mirada ambarina de Garra de Tigre. Corazón de Fuego, consciente de su nuevo estatus, le sostiene la mirada, sabiendo que ambos ya son enemigos declarados. Sin embargo, Corazón de Fuego no pretende amilanarse y considera que está listo para enfrentar a Garra de Tigre si es necesario, dando la cara al desafío.
Echaremos de menos a Cuervo, pero lloraremos por él mañana. Primero hay que llevar a cabo otro ritual... un ritual, lo sé, que habría complacido mucho a Cuervo. Habéis demostrado un gran valor esta noche. ¿Han luchado bien, Tormenta Blanca?
Yo, Estrella Azul, líder del Clan del Trueno, solicito a mis antepasados guerreros que observen a estos dos aprendices. Han entrenado duro para comprender el sistema de vuestro noble código, y os los encomiendo a su vez como guerreros. Zarpa de Fuego, Zarpa Gris, ¿prometéis respetar el código guerrero y proteger y defender a este clan, incluso a costa de vuestra vida?
Entonces, por los poderes del Clan Estelar, os doy vuestros nombres de guerreros: Zarpa Gris, a partir de este momento serás conocido como Látigo Gris. El Clan Estelar honra tu valor y tu fuerza, y te damos la bienvenida como guerrero de pleno derecho del Clan del Trueno. Zarpa de Fuego, a partir de este momento serás conocido como Corazón de Fuego. El Clan Estelar honra tu valor y tu fuerza, y te damos la bienvenida como guerrero de pleno derecho del Clan del Trueno. Corazón de Fuego, estoy orgullosa de tenerte como uno de mis guerreros. Sirve bien a tu clan, joven.
Todos:
¡Corazón de Fuego! ¡Látigo Gris! ¡Corazón de Fuego! ¡Látigo Gris!
La luna ya está casi en lo alto. Según la tradición de nuestros antepasados, Corazón de Fuego y Látigo Gris deben velar en silencio hasta el alba, y guardar solos el campamento mientras los demás dormimos.
